Una vista excepcional: ¡ejercicio con láminas cromoterápicas de REGALO!
Terapias alternativas
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Una Vista Excepcional enseña una metodología para mejorar tu visión gracias a los colores. Te dejamos aquí un ejercicio de prueba, ¡ahora solo te queda entrenar tus ojos!
Redacción Macro Ediciones
Una Vista Excepcional enseña una metodología para mejorar tu visión gracias a los colores. Te dejamos aquí un ejercicio de prueba, ¡ahora solo te queda entrenar tus ojos!
El ejercicio de mirar
Para ser precisos, mirar no se debe a una determinada técnica, sino a una actitud interior. Aun así existe un método de ejercicio que lo facilita. Este ejercicio conecta la visión con el flujo de la respiración y la percepción corpórea. Con un poco de tiempo y de paciencia se aprende fácilmente. Lee las instrucciones y después elige la lámina que prefieras de la sección de los ejercicios (o bien elige ya ahora tu color actual para el ejercicio). Después de haberte relajado físicamente y haber “despertado” a tus ojos con los golpecitos sobre los huesos de las cavidades orbitales, desarrolla el ejercicio siguiendo las instrucciones que encontrarás a continuación.
Instrucciones para el ejercicio
Siéntate cómodamente y con la espalda recta, y observa la lámina cromática. Penetra con la mirada la superficie cromática y deja que se sumerja como en un recipiente. La mirada se puede mover hacia el color, con movimientos que se producen de manera espontánea y automática; mantenla suave, atenta y relajada. Ahora inspira profundamente y espira observando el color de manera relajada.
Espira como si tuvieras una válvula a ambos lados de las plantas de tus pies, por las cuales saliera todo el aire de tu cuerpo. Siente como todo el aire te abandona y tú te contraes completamente. Si respiras de manera audible y perceptible a través de la boca y/o la nariz, como un submarinista que sale a la superficie a tomar aire, empieza por abrir los ojos de manera exagerada e imagina que, junto al aire que respiras, también fluye dentro y a través de tus ojos el color más bello y luminoso procedente de la forma. después de que en tu imaginación, en tus pensamientos y en tus sensaciones haya llegado a las plantas de tus pies, imagina que la energía del color es almacenada en el punto exacto de tu cuerpo donde es necesaria y será beneficiosa.
Ejercítate en esta técnica durante unas cuantas respiraciones consecutivas, intentando empezar tranquilamente e ir aumentando poco a poco paulatinamente la intensidad: dilata la caja torácica, la pared abdominal y los ojos durante la inspiración y, mientras respiras, sumérgete con la mirada en el color energizante.
Mientras realizas este ciclo, registra todas las sensaciones corpóreas, los pensamientos, las asociaciones y las emociones, tanto las agradables como las desagradables, y mantén un contacto constante con ellos.
Cuando espires, sumérgete con ellos en el color, húndete dentro; a continuación inspira los matices más claros y bellos del color y su eventual halo luminoso de un color diferente. Junto al color, absorbe en ti todas las sensaciones, los pensamientos y las emociones que éste te transmite, y llénate completamente. Siente como el color “trabaja” en tu cuerpo.
Finalmente, tápate los ojos con las manos y permanece en esta posición durante algunos minutos, o al menos durante un periodo equivalente a la duración del ejercicio.
Indicaciones útiles
Cuanta más energía utilices para la ejecución de este ejercicio, al inicio durante un cierto periodo y después ocasionalmente para recordar la técnica, mayor será el placer que sentirás al desarrollar todo el programa. Concretamente, si mientras te ejercitas con las láminas cromáticas no te aparecen imágenes remanentes o las que se presentan no son vivaces y coloridas, te recomiendo que te ejercites con la técnica respiratoria. Durante el ciclo de los ejercicios ya no necesitarás practicarla conscientemente con todas sus particularidades: los colores te ayudarán a pasar inmediatamente de ver a mirar. Tu respiración se volverá más suave y fluirá espontáneamente con el color.
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